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Asís se corona con un santo más, Carlo Acutis

Foto del escritor: Fray DinoFray Dino

Asís, la ciudad de los santos san Francisco y santa Clara, se viste de mayor regocijo y a la vez recogimiento, por la llegada de miles de peregrinos de todas partes del mundo que quieren visitar la tumba de Carlo Acutis, el primer santo millennial, que será canonizado el 27 de abril.

Esta acogedora ciudad medieval, suavemente enclavada en las laderas del monte Subasio, en la región de Umbría, es símbolo de la cristiandad. En sus calles transpiran frescor, paz, historia, cultura. Ubicada en el centro de Italia, en la provincia de Perugia, está dominada por dos de sus maravillas, la Gran Basílica de San Francisco y la enorme Rocca Maggiore.

Ahora, con mayor volumen y entusiasmo, se descargan autobuses con ciudadanos del mundo que quieren conocer más sobre Carlos, el chico italiano que gustaba del fútbol y los videojuegos. Pero en especial, de las plataformas tecnológicas donde volcó su fe católica.

El joven desarrolló un talento para la informática y a los 14 años de edad realizó exposiciones virtuales sobre los milagros eucarísticos en el mundo.



Asís vivió un momento de gran esplendor gracias a los movimientos monásticos, en particular los benedictinos. En 1180 nació san Francisco de Asís, un hombre que simbolizó la ciudad porque se puso al servicio de Dios ayudando a los pobres, abandonando la riqueza de su familia. A su figura se une santa Clara de Asís, alumna espiritual de san Francisco y fundadora de la orden de las Clarisas. A los 18 años decidió unirse a Francisco en la pequeña iglesia de Santa María de los Ángeles.


Ahora Acutis forma esa trilogía de santos en esa emblemática ciudad. Su vida fue breve y su santificación muy rápida. Carlo nació el 3 de mayo de 1991 en Londres, donde sus padres Andrea Acutis y Antonia Salzano, trabajaban. Pocos meses después se trasladaron a Milán (Italia).


Carlo Acutis fue un chico como todos, de ir a clases, divertirse y hacer travesuras. Se distinguió, sin embargo, por un amor especial por Dios, aunque sus padres no fueran devotos. Su madre contó que antes de Carlo, ella sólo había ido a Misa para su Primera Comunión, Confirmación y Matrimonio. Pero su hijo amaba rezar el rosario, visitar al Santísimo, hacer obras de caridad, ir a hospitales y ayudar a niños con discapacidad. Fue voluntario en los comedores populares y ancianatos.

Se interesó por la historia de las apariciones de Nuestra Señora de Lourdes y de Nuestra Señora de Fátima, también estudió la vida de los santos, entre ellos Luis Gonzaga y Tarsicio. Pero en particular se interesó por Francisco de Asís, Antonio de Padua, Domingo Savio, María Magdalena de Pazzi y los tres pastores de la Virgen de Fátima: Francisco Marto, Jacinta Marto y Lucía dos Santos.



Conversión de la madre

Su testimonio de fe condujo a una profunda conversión en su madre, quien asegura que “Carlo me acercó a Dios”. Acutis falleció a los 15 años, el 12 de octubre de 2006 -fiesta de la Virgen del Pilar- debido a una leucemia fulminante. Un tipo de cáncer de sangre que afecta a la médula ósea. A partir de entonces Antonia ha replicado el mensaje de fe de su hijo y se ha dedicado a la difusión de su vida.

Carlo Acutis, también conocido como el ‘ciberapóstol de la Eucaristía’ o el ‘primer influencer de Dios’, sabía que pronto moriría y pidió que lo enterraran en Asís. Trató de calmar a Andrea y a Antonia y les dijo: “Hay gente que sufre mucho más que yo” y les confió que pronto serían nuevamente padres; en efecto, nacieron los mellizos Michele y Francesca.

Dijo también: “Estoy predestinado a morir”. “Estoy feliz de morir, porque he vivido mi vida sin perder un minuto en aquellas cosas que no agradan a Dios”. “Ofrezco todo este sufrimiento por el Papa y por la Iglesia”.

Desde abril de 2019 sus restos mortales reposan en una tumba de cristal, con su rostro sereno, bonito, en zapatillas, jeans y suéter, en el Santuario della Spogliazione en Asís. El lugar donde san Francisco lo dejó todo para seguir al Señor.

Su causa de beatificación comenzó el 15 de febrero de 2013 en la Arquidiócesis de Milán, concluyendo el 24 de noviembre de 2016. El 5 de de julio de 2018 el Papa Francisco lo declaró venerable, dos años después su ‘beatificación’. Y el 20 de noviembre de 2024 se anunció su canonización para el 27 de abril de 2025.



Milagros atribuidos y reconocidos

La Iglesia le atribuye un milagro: considera que en 2013 salvó a un niño brasileño «con una rara anormalidad anatómica congénita del páncreas» tras pedir la familia del menor su «intercesión».

El pequeño había nacido en 2010 en Campo Grande, Brasil, con el páncreas prácticamente dividido en dos, por lo que necesitaba una compleja cirugía. La cirugía nunca se realizó porque el niño se recuperó después de una oración especial celebrada por un sacerdote en presencia de una reliquia de Carlo Acutis: un trozo de su pijama.

La Congregación para las Causas de los Santos reconoció esta curación como el milagro necesario para la beatificación de Acutis.

Un segundo milagro atribuido a la intercesión del beato Carlo Acutis, le abrió el camino para su canonización. Se trata de la curación de Valeria Valverde, una joven costarricense de 21 años que sobrevivió a un grave accidente de bicicleta que la dejó al borde de la muerte.

Valverde estudiaba en una universidad en Florencia y en 2022, mientras circulaba por el centro de la ciudad, sufrió una grave caída en bicicleta. Fue sometida a una craneotomía de urgencia con la extracción del hueso occipital derecho del cráneo para disminuir la presión intracraneal. Los médicos indicaron que tenía muy pocas probabilidades de sobrevivir.

Una mujer, que entonces trabajaba como secretaria de la madre de Valeria, comenzó a orar inmediatamente a Carlo Acutis por la recuperación de la chica.


Camino al cielo

Pocos días después, Liliana -la madre de Valeria- viajó en peregrinación a Asís, a la tumba del joven beato, donde también dejó una carta escrita. Ese día, Valeria comenzó a respirar por sí sola y al día siguiente los médicos notaron la recuperación de la movilidad de los miembros superiores y parcialmente del habla.

Luego respondió a órdenes motoras y al día siguiente le retiraron la cánula traqueal. En agradecimiento por su completa curación, Valeria y su madre peregrinaron a la tumba de Acutis en Asís. Lo ocurrido fue documentado por médicos e instruido exhaustivamente por la Iglesia.

Carlo Acutis escribió en su portal: “En cada eucarística voy haciendo un camino al cielo”. El joven será canonizado en tiempo récord, 19 años después de su muerte. Asís se llena de otro santo y sus calles de devotos peregrinos de todo el mundo.

Varios kilómetros al sur de Italia, está san Giovanni Rotondo, el hogar del Santuario del Padre Pío, el santo de los santos.


+ Artículo original de Cambio16.com










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